Entrevistas
NOTA I
"Quiero que se vayan ellos, no me quiero ir yo": el relato de Ailín Leiva, referente de Campomar
Ailín Leiva nació en Campomar, un pequeño barrio fundado por inmigrantes en el Partido de Lanús. Hoy, con 34 años, habita a pocos metros de Mapar y Hebos, dos fábricas que refinan grasa hace casi cuatro décadas en Valentín Alsina.
Desechos pudiéndose en las calles, olor a basura, dolores de cabeza y dificultad para respirar son parte del día a día de los vecinos. Harta de la situación, en 2021 se unió a la Asamblea Vecinal Campomar con el objetivo de culminar la lucha que iniciaron sus abuelos y continuaron sus padres.
¿Cómo es tu calidad de vida viviendo en Campomar?
Mala. Ayer me dispuse a hacer algo simple y cotidiano como ir a la plaza. Fui a caminar mientras las nenas jugaban, pero fue imposible. El olor que había era terrible.
A los pocos minutos, la gente me empezó a parar. Como referente de la Asamblea, las personas vienen y te piden que hagas algo. Saben que no pasa nada si llamas a la Policía, no pasa nada si te quejas con el Municipio de Lanús.
¿Cómo definirías a tus vecinos?
Gente trabajadora. El vecino que vive acá paga el impuesto del 1 a 5 porque cree que el 6 vienen, le cortan el servicio y le sacan la casa. Acá la gente se va a las 5 de la mañana y vuelve a las 8 de la noche.
¿Recordas la primera vez que fuiste consciente del impacto de las graseras en tu calidad de vida?
Si. Mi abuela era una mina que le gustaba lavar a mano. Te decía que el lavarropa no servía. De chiquita la veía como colgaba todo y al rato, por las cenizas y el hollín, lo tenía que descolgar y volver a lavar. El problema fue que a lo último ya era muy viejita para hacer eso.
¿Te afecta emocionalmente ese recuerdo?
Si, pero más allá de eso. Mi hija ayer vino con una compañerita y la nena le decía "que olor hay en tu casa". ¡No era mi casa, era el barrio! Yo la vergüenza ya la pase, pero mi nena está procesando que no quieran venir a su casa, que le digan "en tu casa hay olor, juntémonos en otro lado". Eso me parte el corazón.
¿Cuál fue la respuesta de las fábricas ante sus reclamos?
Ninguna. De hecho, cuando nos metimos a Mapar después de tres días terribles donde no se podía respirar y los obligamos a apagar las máquinas, se llamó a los gerentes, pero no vinieron. Dejaron en un cuerpo a cuerpo a los vecinos con los empleados.
¿Y del municipio?
Las respuestas que tuvimos son descaradas. Te generan tristeza, impotencia y violencia. Hicimos reclamos totalmente genuinos, totalmente apartidarios. Ellos piensan que está lucha es política, eso nos da mucha bronca. Nuestro reclamo es al Intendente, no importa qué color sea.
Las veces que llamaron a Acumar, ¿se hizo responsable?
Si, Acumular cuando llamamos por el mal olor viene. Anda con la patrulla, jugando conmigo a los "Cazafantasmas", pero lo importante no lo hacen.
Jamás vinieron a realizar el estudio de impacto ambiental ni el relevamiento médico. Saben que cuando vengan a hacer el estudio va a saltar la verdad. Y la verdad es que está todo el barrio enfermo y altamente contaminado.
Hace 3 años, Ailín fue diagnosticada con rinitis alérgica, una inflamación de la mucosa nasal que se asocia con síntomas similares al resfriado: picor, estornudos, congestión y mucosa.
¿Sabes si algún otro vecino tiene un diagnóstico parecido?
Acá son todos alérgicos. El que no tiene alergia tiene sinusitis o rinitis. Incluso, existen muchos problemas cutáneos, hay vecinos que les salen escamas en la piel.
¿La Asamblea Campomar presentó algún proyecto para frenar esta situación?
Presentamos un proyecto que quedó en la nada por la lucha de intereses. El problema fue si lo presentaba el Frente de Todos o Juntos por el Cambio. En cuestión, un proyecto que era genuino de la Asamblea Vecinal, no se trató. Esperamos que este año sea diferente.
¿Por qué crees que nadie presta atención a sus reclamos?
¿Cuánta plata te dejan los de Campomar por mes? Tenés más de 56 industrias metidas acá adentro. Las ganancias que se van de acá, no vuelven acá. Mientras tanto, vemos el barrio cada vez peor.
Los Uber no quieren encontrar porque es zona roja. Los que colocan el internet y el cable vienen con seguridad, si es que vienen. No se puede vivir así.
Después de tantos reclamos, ¿qué te impulsa a seguir luchando?
Quiero que se vayan ellos, no me quiero ir yo. Prefiero que mi hija vea a una madre que luchó para que ella viva mejor. No quiero que vea una madre de rodillas, resignada, que se sienta a tomar mate en la puerta de la casa y la haga jugar en medio de la mierda. Esta lucha es mi legado, la que le doy a dejar a mis hijos.
Nota II
"Sacar el barrio adelante": el relato de Ana Paula Serrizuela
El 23 de marzo de 2022, Ana Paula Serrizuela decidió entrar a MAPAR SA, una fábrica que se dedica a la elaboración de harinas de carne y hueso destinadas a la nutrición animal. Lo que vio aquella noche es tan sólo una parte del horror que viven los vecinos del barrio Campomar.
¿Cómo es vivir en Campomar?
Vivir en Campomar es hermoso. Los vecinos somos una gran familia, nos apoyamos y estamos siempre en la dificultad del otro. Por otro lado, el barrio está minado de distintas industrias contaminantes que a veces no sabemos qué están haciendo detrás de un portón de chapa.
En el barrio Campomar están instaladas tres graseras: Hebos, Mapar y Refinerías del Centro. ¿Cómo afecta la presencia de estas fábricas en tu calidad de vida?
Cuando nací ya había una grasera en el barrio y los vecinos se vivían quejando por la instalación de esa industria. Hoy en día, no es lindo vivir en un lugar donde te levantas y hay olor a muerto.
Uno quiere invitar gente a su casa, a su familia, que no es del lugar y no podés. Estás comiendo y entra una baranda tremenda que tenés que cerrar todo. No podés salir a tomar mate a tu balcón. No podés colgar la ropa en el tender porque se llena de olor y hollín.
¿Tuviste problemas de infraestructura por la presencia de estas fábricas en Campomar?
Sí, mi casa está rajando por las vibraciones de las máquinas y los camiones industriales que circulan. El otro día a una vecina le pasó un camión de estos volando por la puerta de su casa y le arrancó todos los cables. Se quedó sin luz, tiene un bebe de un mes. ¿A vos te parece?
¿Tuviste problemas de salud relacionados a la presencia de estas graseras en el barrio?
Hace poquito me diagnosticaron líquido en los pulmones. Los médicos me dicen que fue pulmonía. No fumo, no tengo aire acondicionado y fue en pleno verano. Son cosas extrañas que a veces a uno le ocurren y pensamos que no tienen explicación, pero yo creo que está fundado en la presencia de estas industrias en nuestro barrio.
Tenemos muchos vecinos que tienen rinitis alérgica a causa del olor que se mete por la nariz y la garganta. Otros se descomponen o tienen vómitos por el olor. Tenemos vecinos que, creemos nosotros, murieron por el consumo de agua que circula en nuestro barrio.
¿Cuándo y por qué se creó la Asamblea Vecinal Campomar?
La Asamblea Vecinal se creó a partir de una reunión de vecinos, autoconvocados, en la plaza de nuestro barrio. Surgió porque nos enteramos, a partir de un vecino, que iban a instalar una nueva grasera en Campomar.
El objetivo fue trascender nuestros reclamos. Creemos que si nos unimos y nos quejamos todos, vamos a sacar adelante nuestro barrio.
¿Qué respuesta recibió la Asamblea Vecinal del Municipio de Lanús, Acumular y las fábricas de Campomar?
Del Municipio de Lanús jamás obtuvimos una respuesta. Siempre nos dicen que están habilitados, que es una zona de fábricas.
Acumar si podemos decir que nos escuchó y nos dio respuestas más coherentes que los demás organismos. Hace unas semanas, nos informaron que vamos a estar entre las tres situaciones críticas de la Cuenca Matanza-Riachuelo dentro del Conurbano. De esa manera, ellos van a poder aplicar la normativa y ver qué solución podemos encontrar.
Por otro lado, las fábricas no dan respuestas y las que dan, son terribles. Como que hay "olor a vainilla", por ejemplo. Si vamos a reclamar tratan de arreglar la rajadura, reemplazar los guardapolvos manchados con hollín o pagarnos el lavadero del auto, cosas que no sirven para nada.
El Parque Industrial Curtidor (PIC) de Lanús es un espacio destinado a la radicación de pequeñas y medianas curtiembres de la Cuenca Matanza Riachuelo. ¿Sabes por qué estas graseras no se trasladan allí?
Sí. Dicen que las graseras no pueden ir al Polo Industrial porque ahí están todas las curtiembres. Las curtiembres trabajan con muchos químicos y ellos dicen que las graseras son fábricas que producen alimentos.
El 23 de marzo de 2022, ingresaste a Mapar SA acompañada por los vecinos. ¿Qué encontraron allí?
Ese día con mi vecina Ailín estábamos cansadas. No podía comer, no podía dormir, el olor era terrible. A las 10:30 de la noche, me acuerdo que lloviznaba, tocamos el timbre de todos los vecinos de la cuadra. Juntamos más de 50 personas y fuimos a Mapar SA.
Cuando llegamos estaban las puertas abiertas y entramos. Había ratas, gusanos, huevos, vísceras, grasa y sangre por todos lados. Un olor infernal. Se veían los caños rotos tirando gas y vapor.
¿Qué pasó después de que entraron a Mapar SA?
Días después, entraron a mi casa y me sacaron una foto dormida. Encontré la puerta del balcón abierta. Hicimos la denuncia, pero no pasó nada.